Una de las particularidades de Tailandia es lo absurdo de algunas situaciones; cosas que no tienen sentido, que ellos saben que están mal, pero que nadie hace nada para cambiarlas. Los tailandeses dicen “sabai sabai” que viene a traducirse como “tómatelo con calma”, “todo está bien” o “hakuna matata”. Este va a ser un tema recurrente en este blog así que ahora simplemente voy a narrar el caso absurdo más reciente, el del sistema de aislamiento al aterrizar en el país.
Llegamos a Tailandia vacunados y con una prueba PCR negativa. Aterrizamos y nos hicieron otra prueba que también dió negativa, pero así todo hay que hacer cuarentena en una habitación de hotel. Me parece bien, hay que ser precavidos ya que hay un periodo de incubación y podría ser que tenemos el bicho dentro sin que este haya sido detectado. Pasamos 5 días de cuarentena y nos hacen otro PCR que da tambien negativo; pero hay que seguir encerrados que puede que todavía se esté incubando. Vale, me parece ser bastante precavido pero bueno… A continuación es donde viene lo absurdo.
El día 12 nos hacen el último test PCR y al día siguiente da negativo. Ya no nos van a hacer ningún test más. Está más que claro que no estamos infectados, ¿no? ¿Podremos finalmente dejar el hotel? Pues no, tenemos que quedarnos dos noches más porque sí.
Muchos hoteles lo que hacen es retener el resultado de la PCR un día para no enfadar a sus huéspedes ya los tailandeses intentan siempre evitar la confrontación como sea. Sabai sabai. Sea como sea, ya estamos en el día 14/14 y mañana saldremos en libertad 🙌.