Hoy hemos visitado un santuario de elefantes a tan solo 20 minutos de casa. En este lugar, no hay que pagar ninguna entrada. Simplemente, venden cestos de bananas por 100 bhat (2 euros) para que los visitantes den de comer a los elefantes y tienen una cafetería para consumiciones. En esta época de pandemia, les debe estar costando bastante mantener a los dos elefantes que tienen. De hecho, hace poco salió en las noticias un grupo de elefantes que tuvo que volver al norte de Tailandia desde Pattaya andando por la falta de turistas.
Poder pasar un rato con estos animales tan especiales es uno de los mayores privilegios de vivir en Tailandia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario